Desde aqui quiero comentar lo que vengo observando y de esta manera no solo comenzar una divulgación de un tema específico e importante sino que además va a tomar la forma de un pedido:
Pido que observemos los pies de nuestros mayores.
Tengo el "privilegio" de ver algunas cositas que fallan con los años.
Cuando vamos envejeciendo los pies se nos alejan de nuestro dominio y eso es por varias razones, las más importantes son:
1- La pérdida de flexibilidad y elasticidad de nuestra columna.
2- La limitación de nuestra visión.
Los pacientes me comentan cosas como:
"Daría la impresión que se me han acortado los brazos con los años"
"Parece que se me alargaron las piernas!"
"Me es imposible llegar aunque hago lo posible"
"Si busco puntos de apoyo para los pies(por ejemplo sentados, colocando los pies en otra silla) me molesta la tripa (panza, abdomen, buzarda, etc)" -que con tanto cariño, esmero y dedicación fuímos criando durante toda nuestra vida-
"Si levanto un pie(por ejemplo para apoyarlo en el lavabo, silla, cama) pierdo estabilidad" -lógico-
"Me da apuro decirle a mi familia que no llego"
"¿Como voy a pedir que me miren, limpien los pies?"
Conclusión:
Encuentro a mis pacientes muy aseados (aquí no hablamos del guarro, sucio, abandonado), arreglados, sus ropas combinadas, sus accesorios de moda a juego, pero, solo hasta la media pierna.
Que significa esto:
1- No podemos pedir que se coloquen crema en los pies (alguna parte o todo quedará sin recibirla)
2- No podrán realizarse ninguna cura que les indiquemos.
A lo sumo la harán los primeros días con un esfuerzo sobrehumano y luego desistirán.
3- La higiene no la realizarán como se debe.
Este punto me importa sobremanera ya que es lo cotidiano, lo necesario y lo que con más frecuencia veo ( y huelo)
Sus espacios interdigitales (entre los dedos) realmente están sucios, nadie en el entorno los revisa y, si esa persona acude al podólogo cada 2-3 meses, somos nosotros los que "limpiamos" esa zona "despegando, removiendo, arrastrando" la suciedad acumulada. Muchas veces queda lastimado debajo ya que, no olvidemos que es una zona húmeda, que al ducharse queda mojado porque no llegan a secarse.
Hay que tener en cuenta: no somos nosotros los que tenemos que "limpiar al paciente" y que muchos compañeros no lo harán y hay que entender las razones.
Si esa persona, no acude-necesita al podólogo (por ejemplo: le corta las uñas su pareja ó no se las corta - he cortado uñas que no recibían un corte desde hace 3,4 años-), ese será el tiempo que sus pies no se higienizan.
Se me ha presentado un caso, un ingreso en una residencia:
El paciente vivía solo, sufre una descompensación y es internado. A partir de ahí su estado de salud empeora y la familia decide alojarlo en una residencia.
La doctora que lo atiende en el hospital "recomienda crema en los pies diaria, con urea al 30% para tratar la queratodermia" en lenguaje vulgar el paciente presentaba en todo el pie, desde los tobillos, una capa gruesa, reseca de sobrepiel, cuarteada que efectivamente parecia un engrosamiento y resecamiento extremo de la piel.
NO
Solo era suciedad.
Con paciencia, agua y queratolícos le removí lo que sobraba y solo indiqué crema nutritiva.
Ahí quedo el paciente con sus pies como un "bebe"
Obviamente no puedo explicar lo que "tenía" entre los dedos.
La familia no se desentiende ni lo hizo nunca de su familiar, simplemente no "sabían" que no podia ocuparse de sus pies.
Por todo lo demás, el paciente era el sinónimo de limpieza.
Reflexiones.....
Muchos por orgullo, muchos por no "molestar" no nos dicen las incapacidades que les van surgiendo.
Yo, por mi profesión cuento mis anécdotas para ayudar, sobre todo a reflexionar.
Si atendemos a nuestros niños y nos encargamos de su limpieza total (orejas, espalda, pies, uñas, etc)
¿porque no lo hacemos con nuestros mayores? ¿es porque los niños crecen y nuestra ayuda y su dependencia tiene fecha de caducidad, mientras que los mayores cada vez son más demandantes?
Yo alguna vez fuí niña, aunque no recuerde lo que hacían por mí.
Alguna vez seré mayor con limitaciones (sino lo soy es porque he muerto antes).
En nuestro comienzo y en nuestro final también somos seres humanos, con necesidades que deben ser realizadas por otro.
Lo triste es que en la 1ª etapa se hacen con agrado, simpatía, obligación por amor, esmero, cariño.
En la última etapa parece como que "molesta" generando molestia, enfado,"obligación por obligación"
No sabía yo que los bebes y niños son más concientes de los afectos que le brindan, sean cuales sean, que los mayores, sea su estado mental cual sea.
Yo por mi parte, lo hago por interés... Como se que en algún momento lo voy a necesitar, ahora que puedo lo hago.
Dios quiera haya alguien compasivo a mi alrededor que cuando llegue el momento y aunque no lo pida porque no quiero ó no puedo, siga pensando que dentro de ese cuerpo decrépito, marchito, sigue habiendo la esencia de un ser humano único, irreemplazable con necesidades materiales y sobre todo afectivas que "deben ser cubiertas".
Solo el cuerpo físico tiene fecha de vencimiento. Todos tenemos "fecha de vencimiento". Todos somos vulnerables al llegar a "viejos"
Si todos pensáramos de vez en cuando en esto.
Nuestros "viejitos" somos nosotros mismos reflejados en el espejo de la vida.
Yo perdí algunos de los míos, otros están tan lejos que son inalcansables, pero la vida me dió una oportunidad de "adopción temporal" por medio de mi profesión.
Limpiemos, cuidemos, brindemos amor de palabra y de gestos, que el silencio y las malas caras tienen un lenguaje propio y entendible.
Hasta la próxima